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1 pollo de 1,3 kg
1 cucharada de miel
1 anís estrellado
1 tira de piel seca de mandarina
1 cucharadita de sal
aceite abundante para freír
2 limones cortados en gajos
SAL DE CINCO ESPECIAS
1 cucharadita de pimienta blanca en grano
2 cucharadas de sal marina
1/2 cucharadita de polvo 5 especias
1/2 cucharadita de pimienta blanca molida
Lave el pollo en agua fría y póngalo en una cazuela cubierto con agua helada, añada la miel, el anís estrellado, la piel seca
de mandarina y la sal; lleve a ebullición.
Reduzca el fuego al mínimo y deje que hierva durante 15 minutos.
Pase el pollo a una fuente y deje que se enfríe.
Córtelo en dos mitades a lo largo y póngalo, sin tapar y sobre papel absorbente; en la heladera durante 20 minutos.
Caliente el aceite en un wok el aceite estará bastante caliente para freír cuando un trozo de pan se ponga dorado en 30
segundos.
Meta con cuidado medio pollo, con la piel hacia abajo.
Fríalo durante 6 minutos, déle la vuelta y hágalo otros 6 minutos, asegurándose de que toda la piel toca el aceite.
Escurra en papel absorbente.
Repita la operación con la otra mitad del pollo.
LA SAL DE 5 ESPECIAS
Tueste la sal y los granos de pimienta en una sartén hasta que la mezcla desprenda un olor aromático y la sal esté ligeramente
dorada.
Macháquelo en un mortero.
Mezcle con el polvo de 5 especias y la pimienta blanca y póngalo en un platito poco hondo.
Despiece el pollo; sirva espolvoreado con la sal de cinco especias y con gajos de limón.
la sal de especias puede conservarse en un recipiente seco y hermético varios meses.
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